El hotel, que ha obtenido una calificación de cuatro estrellas, tendrá 66 habitaciones distribuidas en seis plantas. El ático albergará un restaurante de autor, mientras que el roof-top contará conuna zona chill-out vinculada al restaurante.
La fachada aporta un punto vanguardista, ya que se trata de una sucesión de lamas de vidrio, que desplegarán una amalgama de reflejos y tonalidades cambiantes.
Destacan las medidas estrictas de control solar y aislamiento acústico, que tiene como resultado un edificio eficiente energéticamente.