Atendiendo a las empresas vinculadas al Turismo, no se aprecian grandes cambios respecto a la edición anterior. Entre los grandes morosos y defraudadores de España aparecen más de una treintena de sociedades, la mayoría ya desaparecidas. Mención especial merece el complejo de vacaciones Marina d'Or, que se mantiene en lo más alto de la tabla con una deuda de 45,3 millones de euros.
Le sigue el extinto grupo Marsans, del que fueron propietarios Gerardo Díaz Ferrán y el fallecido Gonzalo Pascual. Viajes Marsans adeuda 23,7 millones de euros, seguida de Air Comet con 13,9 millones y Hotetur con tres millones. Llama la atención la desaparición de la lista de Viajes Crisol, también perteneciente al grupo Marsans, cuya deuda ascendía a 1,7 millones hace un año.
Orizonia, que tres años después de la desaparición de Marsans protagonizó la otra gran quiebra del Sector Turístico español, debe un total de 26,2 millones. Además de los 5,9 millones que adeuda el grupo, también figuran en la lista de morosos Iberworld con 7,2 millones, Viajes Iberia con 8,1 millones, Iberojet con 1,6 millones e Iberotravel Vacations Holding con 3,4 millones. Por detrás de Viajes Iberia y Viajes Marsans está Viajes Marbesol, cuya deuda es de 4,2 millones de euros.
Además de las desaparecidas aerolíneas aéreas de Orizonia y Marsans, en la lista de la Agencia Tributaria están otras compañías aéreas. Spanair, que en enero de 2012 cesó operaciones de forma repentina dejando en tierra a miles de pasajeros, debe prácticamente lo mismo que hace un año: 7,1 millones. Gadair European Airlines, por su parte, debe a las arcas públicas 1,3 millones. También figuran dos aeropuertos: el de Castellón, con 4,2 millones, y el de Ciudad Real, con siete millones.