Coincidiendo con la inauguración del 64 Festival de San Sebastián, el auditorio del Palacio de Congresos Kursaal ha estrenado dos proyectores de tecnología 4K, de Ultra Alta Definición (UHD), lo que supone cuatro veces más en definición y aproximadamente el doble de potencia de luz para disfrutar de las películas que se ven en la Sección Oficial del certamen.
Con 34.000 lúmenes y doble proyector, el Kursaal —convertido durante 10 días en sede principal del Festival y objetivo de los focos de la cinematografía internacional— ofrece la mejor calidad en proyección de películas e incluso puede hacerlo en 3D sin pérdida de luz.
Sobre las oportunidades y desafíos que ofrece este nuevo estándar de Ultra Alta Definición para la producción cinematográfica se debatirá además en el marco del certamen, en el workshop ‘Cine y tecnología. Los retos de rodar en 4K’, organizado por Hispasat, que se celebrará mañana día 20 en una sala del Kursaal.
La última gran revolución del sector
Los expertos del mundo cinematográfico tratan actualmente de impulsar la creación y exhibición de contenidos audiovisuales grabados en 4K, la última gran revolución tecnológica del sector. Se trata de un formato que, al
multiplicar por cuatro el número de píxeles de una pantalla de alta definición convencional, permite a los espectadores disfrutar de una experiencia cinematográfica inédita con una calidad de imagen nunca antes vista.
Por otra parte, el auditorio del Kursaal, concebido y acondicionado como sala de audición musical el resto del año, ha vivido una serie de modificaciones en estas fechas para transformarse en el K-1, la sala de cine principal del Festival dado que acoge las películas de la Sección Oficial. Así, además de los nuevos proyectores, desde 2014 cuenta gracias a la colaboración del Festival, con
un acondicionamiento acústico para la audición de cine. Con un espíritu de mejora continua y con intención de conseguir una mayor calidad en el sonido, se colocan cada septiembre
paneles de lana de roca absorbentes, además de cuatro bambalinas y tres telones detrás del escenario y sin que esto afecte negativamente a la estética de la sala.