La posible salida de Reino Unido de la Unión Europea impactaría de lleno en el destino España. La devaluación de la libra esterlina, unida al posible restablecimiento de fronteras, restaría competitividad al destino, que a día de hoy mantiene una elevadísima dependencia del emisor británico.
Los británicos decidirán mañana si quieren o no seguir formando parte de la Unión Europa. Esta consulta, con cuya convocatoria el primer ministro, David Cameron, cumplía con su promesa electoral, ha generado gran incertidumbre en los mercados y, además, se desconoc
e cómo podría afectar la ruptura con la Unión Europea tanto a la economía británica como a la de sus actuales socios.
La devaluación de la libra convertiría a España en un destino más caro
Lo que parece evidente es que, en caso de que finalmente triunfe el Brexit (British Exit), el Turismo europeo, y especialmente el español, saldrían perjudicados. Según un documento del ‘portal’ Invertirenbolsaweb.net, los destinos españoles se verían afectados principalmente por dos cuestiones.
Fin a la libre circulación de viajeros
En primer lugar, la salida de Reino Unido de la Unión Europea tendría como
efecto inmediato una fuerte devaluación de la libra esterlina respecto al dólar y, aunque en menor medida (debido a que también se prevé una depreciación del euro), en relación al euro. Por tanto,
el destino España se encarecería y dejaría de ser un país barato para visitar, factor clave en la decisión de los turistas.
Por otro lado, en el caso de que llegará a existir una frontera,
habría limitaciones importantes a la hora de obtener visados (de días, condiciones para su aprobación, etc…), por lo que al dejar de existir la libre circulación de personas sería más complicado el acceso.
A pesar de los esfuerzos de las Administraciones públicas y de los propios empresarios del Sector Turístico
, el destino España sigue teniendo una gran dependencia del emisor británico. Sin ir más lejos, de los 18 millones de turistas internacionales recibidos en el primer cuatrimestre, cuatro millones procedían de Reino Unido, que además protagoniza un significativo avance interanual del 19,4%. Algo similar ocurre con el gasto. Los británicos han aportado hasta abril
3.432 millones de euros, el 19,2% del total y un 15,4% más que en el mismo periodo de 2015.