Las principales Comunidades autónomas de destino, sin excepción alguna, se han beneficiado de este buen comportamiento, superando con creces los resultados obtenidos en los cuatro primeros meses de 2015. Mención especial merecen Andalucía, Baleares y Comunidad Valenciana, todas ellas con crecimientos superiores al 20%.
Rusia se recupera tras el desplome sufrido en los últimos años
No obstante, a pesar de que la gran evolución del destino es incuestionable, hay que mencionar la significativa incidencia que ha tenido la inestabilidad reinante en países competidores como Turquía, Túnez y Egipto, entre otros. Aunque la Administración turística no ha cuantificado cómo influye esta situación en la llegada de turistas a nuestro país, todo parece indicar que el desvío de turistas explica en gran medida este boom en las llegadas. Grandes operadores internacionales han eliminado (o reducido de forma significativa) sus programas a los citados países, decantándose muchos de ellos por España y por otras zonas del Mediterráneo occidental como destinos refugio.
Llama la atención el caso de Rusia. Tras protagonizar un desplome en los últimos años motivado por la depreciación del rublo y la crisis económica que atraviesa, las llegadas de turistas rusos a nuestros país han recuperado una tendencia alcista a raíz de la tensión política con hasta hace poco su principal destino turístico, como es Turquía. En los cuatro primeros meses del año experimenta un incremento interanual del 5,1º%, con cerca de 200.000 viajeros.
En este periodo, todos y cada uno de los grandes mercados emisores de turistas superan ampliamente las cifras registradas un año antes. Reino Unido es el claro dominador con cuatro millones de turistas, un 19,4%. Le siguen Alemania y Francia, ambos con 2,6 millones. El primero crece un 6,7% en relación a 2015, mientras que el segundo lo hace un 9,5%.