El Patronato de la Alhambra intentará acabar con los problemas de disponibilidad que sufren las agencias de viajes. Para evitar el ‘acaparamiento’ de entradas por parte de determinadas empresas, obligará a abonar el 80% del importe en el momento de la reserva, frente al 20% que pide ahora.
El Patronato de la Alhambra y Generalife reacciona ante las críticas de las empresas turísticas de la provincia. Su directora, María del Mar Villafranca, ha avanzado que se modificará el sistema de reservas para "evitar el acaparamiento" de entradas por parte de determinadas agencias de viajes. En concreto, se exigirá el pago del 80% del precio en el momento de la reserva, en vez del 20% que se pide actualmente.
Pese a ello, defiende el sistema actual porque "persigue una distribución de la oferta lo más equitativa posible", a la vez que "contribuye a un uso sostenible del recinto". Además, remarca que "para cumplir los objetivos marcados se ha impulsado el diálogo y la cooperación con las agencias y se ha flexibilizado la normativa para integrarlos en el proceso de comercialización".
‘Solicitan más entradas de las que venden’
Villafranca acusa a las propias empresas del Sector de ser las causantes de los problemas de disponibilidad que se están produciendo. "Hacen unas peticiones de entradas muy superiores a la demanda real", sostiene. Según detalla, agencias y turoperadores disponen de un cupo del 39%, si bien en 2014 tan solo utilizaron el 37,2%, lo que a su juicio demuestra que "solicitan muchas más de lo que realmente venden".
Como publicó NEXOTUR, agencias y turoperadores denunciaron el pasado mes de marzo la "ineficacia" del Patronato de la Alhambra y Generalife a la hora de gestionar la venta de entradas. Profesionales consultados por este periódico aseguraban entonces estar perdiendo clientes y credibilidad ante la imposibilidad de garantizar visitas con antelación, a lo que se une la competencia desleal de determinadas empresas.
Además, advertían de que algunos turoperadores extranjeros habrían optado por quitar Granada (e incluso Andalucía) de sus itinerarios, "redirigiendo a sus viajeros a destinos mejor gestionados". "Y todo ello ante la pasividad de las instituciones públicas, que hasta el momento, y pese a las reuniones mantenidas, solo han conseguido que empeore la situación", aseguraban.