Europa crece a dos velocidades. Mientras que los destinos emergentes y los tradicionales de la zona sur registran espectaculares incrementos de turistas en 2014, los de Europa del Este se han visto afectados por las tensiones políticas y la recesión económica. Los mayores crecimientos corresponden a Islandia y Grecia, mientras que España aparece en el top ten.
Europa alcanzó en 2014 un nuevo récord como destino turístico. Como avanzó la Organización Mundial del Turismo (OMT), la región experimentó un incremento del 4% respecto al ejercicio anterior, recibiendo un total de 588 millones de turistas internacionales (22 millones más que en 2013). Por quinto año consecutivo, el viejo continente creció por encima de la tasa promedio del 2,4% prevista para el periodo 2010-2025.
Sin embargo, los datos recabados por European Travel Commission (ETC) demuestran que hay dos velocidades. Por un lado, los destinos de Europa del Este, que se han visto fuertemente afectados por las tensiones políticas y la recesión económica, son los que peor evolucionan a lo largo del año.
La recuperación de los grandes emisores beneficia a Europa
En el lado opuesto están los destinos emergentes y las grandes potencias del sur de Europa. Los primeros se han visto beneficiados de las inversiones efectuadas para reforzar su potencial turístico, destacando los aumentos de turistas de Islandia (+24%), Letonia (+15%), Serbia (+12%), Rumanía y República Checa (ambos con un avance del 11%). Entre los destinos tradicionales del arco Mediterráneo llama especialmente la atención la recuperación de Grecia, con un 22% más de viajeros que en 2013, así como el avance del 9% de España. Ambos se encuentran entre los diez países de Europa con mayores tasas de crecimiento. Les siguen Malta, Eslovenia, Croacia y Turquía, con tasas positivas que van del 7% al 5%.
Para ETC, los buenos datos turísticos del viejo continente son fiel reflejo de "la recuperación de la mayoría de mercados emisores y los esfuerzos en materia de promoción", especialmente con acciones dirigidas a combatir la estacionalidad. No obstante, después de cinco años consecutivos con fuertes tasas de crecimiento, el escenario geopolítico y económico "genera incertidumbre", reconoce en su informe. Para 2015, se prevé que Europa siga incrementando su cifra de turistas. Si bien lo hará a un ritmo más lento, con tasas de entre el 2% y el 3%.