El número de personas que han visitado las instalaciones de balnearios y spas en las ciudades cayó una media de un 15% durante el año pasado, al igual que lo hizo el descenso del gasto medio de los clientes, con un 22%. Sin embargo, el mayor efecto negativo se ha notado en el 'frenazo' de nuevas aperturas.
El presidente de la Asociación Española de Balnearios Urbanos y Spas (Spatermal), Alfredo Pérez, considera que el hecho de que este tipo de instalaciones recibiera un 15% menos de visitas no significa una caída preocupante "aunque, reconoce, que sí lo el descenso del gasto medio".
Pérez ha querido incidir en que el efecto 'negativo' de la crisis económica se ha notado, sobre todo, en el freno en la construcción del número de los espacios dedicados a ello que suman un total de 1.600 actualmente. Según explica, "en los últimos cuatro años y medio se llevaron a cabo más de 1.400 proyectos mientras que en estos meses de 2012 solo lo han hecho seis como consecuencia del freno que ha experimentado el sector hotelero español".
A pesar de que España es el sexto país del mundo en la utilización de estas instalaciones de 'relax' con más de seis millones de usuarios al año, actualmente la evolución general es bastante irregular "con algunos establecimientos que han cerrado y otros con más ingresos", añade. No obstante, "los que peor lo están pasando son los locales con oferta solo de agua situados a pide calle, debido a que el coste de mantenimiento de las instalaciones es muy elevado".
Futuro 'optimista'
Según el presidente de la Asociación, aunque es "muy complicado" que este año y parte del próximo el turismo de balnearios urbanos vuelva a 'resurgir', es "curioso" cómo la crisis no ha afectado tan directamente a este mercado como podría imaginarse. Y es que el cliente no se resigna a este capricho que se ha permitido en los últimos tiempos y muchos lo han incorporado a su vida como algo más rutinario, por lo que no pasa por una situación "tan desastrosa" como en otros segmentos.