Barcelona cerrará el año 2024 con un impacto récord superior a los 10.000 millones de euros a pesar de una ligera disminución en el número de turistas, que se espera llegue a los 15,5 millones, un 0,7% menos que el año anterior. Este resultado positivo se debe en gran parte al aumento del gasto por turista, que ha alcanzado los 99,71 euros por persona y noche, lo que representa un incremento del 8,7%.
Los congresistas gastan más de media que los turistas convencionales
El turismo MICE juega un papel clave en este crecimiento, con un notable impacto en la economía local. La estrategia del Barcelona Convention Bureau, centrada en atraer grandes congresos y convenciones, ha generado un aumento en el gasto turístico, especialmente en el sector de los congresos, que tradicionalmente aporta un mayor valor añadido. Este tipo de turismo no solo incrementa el gasto directo, sino que también favorece la permanencia más prolongada de los visitantes, lo que se traduce en un mayor número de pernoctaciones.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, destacó que el aumento en las estancias y el gasto por visitante demuestra el éxito de las políticas turísticas implementadas por el Ayuntamiento para gestionar y diversificar el perfil del turismo en la ciudad. Aunque el número de turistas ha disminuido ligeramente, se espera un incremento en el número de noches alojadas, lo que apunta a un turismo más cualificado y con mayor capacidad de gasto.
El presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Josep Santacreu, subrayó la importancia de los congresos y convenciones en la estrategia turística de la ciudad, ya que este segmento es clave para generar un mayor valor económico, tanto para los hoteles como para el sector de la restauración y los servicios. La alta satisfacción de los turistas, especialmente en áreas como la cultura, la arquitectura y la gastronomía, refuerza la imagen de Barcelona como un destino de calidad para el turismo de negocios y eventos internacionales.
Así, a pesar de los retos que plantea la disminución del número de turistas, el sector turístico de Barcelona continúa demostrando su resiliencia y capacidad de adaptación, con un modelo que favorece el turismo de mayor valor y el impulso del gasto por visitante, especialmente en los sectores MICE y de congresos.