PMS o TPV son los nuevos sistemas a implementar
En 2025, los hoteles ya no solo estarán enfocados en ofrecer comodidad y buen servicio: además, estarán diseñados para anticipar y adaptarse a cada huésped en tiempo real. La industria hotelera ha entrado en una fase de sofisticación tecnológica que está transformando cada aspecto de la operación, desde la sostenibilidad y la gestión de inventarios hasta la hiperpersonalización de cada estancia.
"La tecnología es el motor que va a definir el Sector hotelero en los próximos años. En 2025, los hoteles que lideren el mercado serán aquellos que se adapten con flexibilidad, respondan a las necesidades cambiantes de sus huéspedes y mantengan un enfoque sólido en sostenibilidad y personalización", señala Fernando González-Haba, director de servicios en Arbentia.
En este contexto, la consultora identifica la automatización de procesos operativos como una de las claves en esta transición ya que permite simplificar tareas repetitivas, reducir tiempos y optimizar recursos humanos. Gracias a la parametrización de inventarios, pedidos y seguimiento de stock, los hoteles pueden configurar mínimos de stock y puntos de reposición, asegurando una operativa continua y un control detallado de recursos.
La integración avanzada de sistemas es otra de las claves: en el ecosistema hotelero, diferentes sistemas (PMS, TPV y herramientas específicas de negocio) generan y recopilan datos de forma continua. La capacidad de integrar estos sistemas permite centralizar la información y mejorar la toma de decisiones.
La digitalización ha avanzado significativamente también en la gestión de compras y proveedores, con listados de precios por proveedor y un control granular que optimiza su comparación. Además, la categorización por familias de productos asegura que los hoteles trabajen siempre con proveedores activos y con precios actualizados. Al aplicar ajustes automáticos en tarifas, se puede mantener el control de costes sin procesos manuales extensivos, adaptándose de inmediato a los cambios.