Desde ANEN han presentado un Plan para el Desarrollo del Turismo Náutico
De esta manera, ya se podrán aplicar las especificaciones de servicio, limpieza y desinfección, mantenimiento y gestión del riesgo. Sin duda, esto significará un alivio para un sector con una actividad económica que incluye en España a 3.700 empresas y que genera 82.325 puestos de trabajo directos e indirectos, y que se ha visto muy afectado por la pandemia. De hecho, el mercado de embarcaciones de recreo en España ha registrado un desplome en sus matriculaciones del 43,2% hasta mayo, según datos del Informe del mercado de embarcaciones de recreo editado por la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN). La comparación es terrible: en este tiempo se han matriculado en España 1.400 embarcaciones de recreo frente a las 2.466 registradas en el mismo período del año pasado. Esto ha supuesto que los 292 puertos deportivos existentes en España, con una capacidad global de 131.100 amarres, hayan tenido que paralizar su actividad en estos meses.
Es por ello, por lo que desde ANEN han presentado un Plan para el Desarrollo del Turismo Náutico, "que está siendo estudiando en estos momentos" tanto por parte de la Secretaría como por TurEspaña para que las propuestas de actividades náuticas formen parte de la oferta global de Turismo. Tal y como señala su secretario general, Carlos Sanlorenzo, "necesitamos el apoyo de la Administración, no solo en el apartado económico sino también a nivel de promoción para que se incluyan las actividades náuticas en las campañas institucionales de turismo, que previsiblemente se reactivará desde mediados de junio".
Desde el pasado 11 de mayo, la náutica de recreo empezó la desescalada en aquellas Comunidades que superaron la fase 0, de acuerdo con las limitaciones previstas en cada una de las fases del Plan de Transición hacia la Nueva Normalidad (PTNN). Así, los territorios que se encuentran en esa primera fase, pueden practicar la navegación de recreo, siendo personas que tengan su domicilio en la misma provincia, isla o ciudad autónoma en que esté amarrada su embarcación. Las motos náuticas y las embarcaciones o buques de recreo no pueden alejarse más de 12 millas del puerto o instalación de amarre desde el que comiencen la navegación. Además, la ocupación a bordo no puede superar el 50%.
Ya en la fase 2 se incluyen todas las actividades náuticas de recreo, sin más limitaciones que las que rijan con carácter general. Además, la ocupación a bordo se amplía al 75% de las personas autorizadas en los certificados de la embarcación, salvo que se trate de personas que conviven en el mismo domicilio en cuyo caso se podrá alcanzar el 100% de ocupación. Igualmente, se pueden alquilar, incluido en arrendamiento náutico, embarcaciones de recreo, motos náuticas y artefactos náuticos de recreo, por parte de personas de la misma provincia, isla o ciudad autónoma. Del mismo modo, en la fase 3, ya se autorizan las actividades, sin más limitaciones que las que rijan con carácter general, como pueden ser las de carácter geográfico y la adopción de las medidas sanitarias de prevención.