Son cuatro puntos de subida entre enero y marzo y otros cinco entre abril y junio, por lo que se acelera el ritmo de crecimiento de la confianza a medida que transcurre el año. Este dato, además, acerca a España a la media europea situada en 79 puntos, tal como indica el último Estudio Global de Confianza de los Consumidores, elaborado por la consultora Nielsen.
España se desmarca así del resto de economías periféricas, como Portugal, Italia y Grecia, donde la confianza oscila entre los 53 y los 57 puntos, destacando por llamativa la caída de 12 puntos de la confianza griega con respecto al primer trimestre del año, en plena crisis del gobierno heleno y la Troika europea sobre la deuda a pagar por Grecia.