De esta manera los hoteles Fuerte Grazalema, Fuerte Conil – Costa Luz y Fuerte El Rompido han superado una auditoría que ha supuesto la inspección de las instalaciones y sus procesos de gestión ambiental, así como la evaluación del cumplimiento legal aplicable a la actividad hotelera. Desde Aenor han valorado además que la cadena vaya más allá de la ley pertinente y haya apostado por desarrollar su propia herramienta de medición de la Huella de Carbono.
De esta manera Fuerte Hoteles es reconocido por su compromiso con la sociedad y su entorno dentro de sus políticas de Responsabilidad Social Corporativa, que cada año plasma en su Memoria de RSC. Este documento recoge más de 50 medidas innovadoras destinadas a reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera mediante el ahorro energético, un consumo hídrico más eficiente y el continuo reciclaje de residuos. Este control de los recursos se desarrolla mediante una metodología propia que proporciona a los hoteles del grupo la información necesaria para conocer su impacto e identificar los puntos de mejora a través de la Huella Ecológica y de Carbono.
Los últimos datos de los que dispone la cadena indican que durante el 2014 las medidas implantadas han propiciado la reducción del consumo de agua en un 0,2% y el consumo energético en un 5,57%. Asimismo las emisiones de CO2 a la atmósfera en los siete hoteles que tiene el grupo han supuesto 13,56 kg/CO2 por estancia, lo que sitúa un año más a la cadena en niveles ejemplares respecto a su emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera. En cuanto a la gestión del reciclaje, durante el año 2014 la cadena recolectó más de 43 toneladas de vidrio, otras 43 de papel y cartón, 4.027 kg de plástico y 3.700 de aceite vegetal de cocina, el cual se destina a producir biodiesel.
Puede destacarse que con los datos anteriores de consumo (reducción de la energía eléctrica) se ha producido una disminución del indicador de Huella de Carbono, especialmente en abril, julio y agosto con respecto al año anterior.