Nacido en Casablanca hace 50 años, Didier de La Ferrière se formó en la escuela de Hotel Management de Glion en Suiza antes de iniciar su carrera profesional en un establecimiento de la cadena Sheraton en Londres y posteriormente en el Holiday Inn Crowne Plaza de su ciudad natal. En 1995 inició su trayectoria en el Grupo Accor como director de Restauración del Sofitel de Cartagena de Indias en Colombia, y tres años más tarde aterrizó por primera vez en España para ocupar el mismo cargo en el Sofitel Madrid Aeropuerto. Diez años más tarde, en 2008, volvería al mismo hotel de la capital española convertido en director general del Pullman Madrid Airport & Feria, pero previamente pasó más de un lustro en los Estados Unidos como director operativo del Sofitel de Nueva York primero, director general en Houston después y finalmente director general en San Francisco.
"He tenido la gran suerte de haber podido compartir con mi familia experiencias apasionantes en distintas ciudades y regiones del mundo, cada una de ellas con su encanto particular. Barcelona, en concreto, es una ciudad muy dinámica que atrae a visitantes de todo el mundo por sus propuestas arquitectónicas y su rica historia, entre otras. Personalmente, lo que más me gusta de este nuevo puesto en el Pullman Barcelona Skipper es el hecho de poder trabajar y vivir a la orilla del mar como hacía en mi Casablanca natal", destaca Didier de la Ferrière.