La compañía aérea pretende alcanzar el "punto de equilibrio" en torno a unos seis meses y lograr una cifra de clientes de entre cuatro y cinco millones de pasajeros. Barahona también ha señalado que la aerolínea contará solo con uno o dos tipos de aviones que dispongan de asientos de primera clase, aunque ha especificado que "no funcionarán como ‘Business class’", sino que "más bien" se van a utilizar para "compensar la lealtad de los clientes".
Esta eliminación, según él, no responde a una política de bajo coste empresarial, “por lo que Mexicana no puede ser comparada con empresas ‘low cost’”. Según el representante legal de PC Capital, la eliminación de la clase ejecutiva se debe a una adaptación de las "necesidades del mercado", pues actualmente este segmento de clientes "ya no demanda ese servicio", además de que existen compañías que "no permiten que se compre ese tipo de billetes", ha aclaróado.
Mexicana de Aviación, una de las dos más importantes de México, arrastra una deuda de más de 727 millones de euros y tiene un administrador designado por el Gobierno, además de un conciliador por el juez que lleva el caso. El grupo de inversores mexicanos PC Capital la ha adquirido tras cerrar el acuerdo definitivo con Tenedora K, la sociedad propietaria de la aerolínea y de sus dos filiales Click y Link, para el traspaso del 95% de las acciones de su sociedad matriz Nuevo Grupo Aeronáutico (NGA).
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