Meliá atribuyó el empeoramiento del 31,4% en su resultado financiero respecto al año anterior a unos mayores gastos financieros, por importe de 4,4 millones de euros, y de menores ingresos por valor de 11,6 millones de euros. El resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo alcanzó los 149,1 millones de euros, lo que supone una mejora del 5,1%, mientras que el beneficio antes de impuestos superó los 51 millones, un 20,1% menos.
La cifra de negocio de la cadena hotelera balear alcanzó los 1.335 millones de euros, lo que supone una mejora del 6,7% con respecto al ejercicio anterior. Los ingresos del negocio hotelero aumentaron un 5,4% respecto a 2010. Durante 2011, la sociedad matriz del grupo ha abonado 9,47 millones de euros en concepto de dividendos.
Los ingresos por habitación disponible (RevPar) repuntaron un 9%, gracias al crecimiento registrado en la ocupación, que repuntó un 6,3% y a un incremento del precio medio por habitación del 2,5% durante 2011.
La hotelera de la familia Escarrer destacó la favorable evolución de los destinos vacacionales en Latinoamérica y Mediterráneo y el comportamiento igualmente positivo de las ciudades europeas, que explican el aumento de sus ingresos hoteleros. En España, señaló la buena evolución de Madrid y Barcelona, que compensó el peor registro de ciudades secundarias (un 13% de los ingresos).
Meliá subrayó que sus resultados durante 2011 han estado marcados por una evolución desigual en la economía mundial, si bien los índices de confianza procedentes de EE.UU., Japón y Alemania son "positivos". Así, la compañía está logrando un "buen rendimiento" en los hoteles y complejos de Latinoamérica y El Caribe, como reflejo de una tendencia al consumo de sus principales emisores (EE.UU., Canadá y Brasil). Tendencia que también constata en Indonesia, China, Japón, Rusia y Australia.
Mercado doméstico débil
En España, sus hoteles en Canarias mantienen por el momento su evolución positiva, beneficiándose de los flujos turísticos por efecto de la ‘Primavera Árabe’, que continuará probablemente continúe el próximo verano.
No obstante, ante la "débil situación" del mercado doméstico Meliá mostró cautela y dijo que las próximas semanas serán "cruciales", ya que es un fuerte periodo de ventas en Reino Unido, el principal mercado emisor a España, y en Europa Central, con lo que contará con mayor visibilidad a finales de abril sobre sus previsiones.
En Europa se refirió a la inauguración del ME London, coincidiendo con la celebración de los JJ.OO. en Londres este verano, lo que debería suponer aumentos tanto en ocupación como en precios. En París apostará por el segmento corporativo.









