Un año y medio después de perder Aerolíneas Argentinas, el Grupo Marsans vuelve a estar en el punto de mira del Gobierno argentino. En esta ocasión el Estado argentino ha abierto un expediente administrativo a su filial Marsans Internacional Argentina (Miasa) por la emisión de cheques sin fondos, entre otros motivos. Tras conocer esta medida, Marsans ha decidido enviar "urgentemente" a un auditor ejecutivo del grupo, con plenos poderes, para examinar "de primera mano" la situación de Miasa.
En un comunicado, el grupo propiedad del presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y de Gonzalo Pascual, detalla que su filial es una compañía de gestión independiente cuyo presidente ejecutivo, Luis Magariños, "ha informado de una serie de problemas que para valorar adecuadamente requieren acción inmediata". Por ello, el grupo ha decidido enviar a un auditor para "adoptar de la forma más inmediata posible" una solución. "Miasa, que opera en el país iberoamericano desde 1969 con regularidad y eficiencia, ante los problemas recientes surgidos tomará las soluciones necesarias y adeucuadas", afirma el grupo.
Cheques sin fondos y falta de pago de la nómina a sus empleados
El Gobierno argentino abría un expediente administrativo a la filial de la empresa española Marsans Viajes en este país por la emisión de cheques sin fondos y por la falta de pago de la nómina a sus empleados, según informaba el director de Gestión de Calidad Turística en Argentina, Gonzalo Casanova. En los juzgados de Argentina se han presentado además tres solicitudes de quiebra por parte de acreedores de la agencia de viajes. Preguntados por estas cuestiones, desde el Grupo Marsans han evitado hacer declaraciones hasta que el auditor analice la situación, aunque sí han confirmado que "Marsans Internacional Argentina no está en quiebra".









