¿Cuándo empieza NH Hoteles a actuar, de forma concreta, en materia de sostenibilidad?
La experiencia comenzó en 2003 cuando empezamos el proyecto de sostenibilidad en España como base fundamental de estudio, lo que nos llevó a ver las ventajas que esto tenía para nosotros y aprender mucho sobre cómo teníamos que incorporarlo en el resto de países en los que estamos presentes. Esto toma un impulso mayúsculo el año pasado cuando el presidente decide comunicar oficialmente que hay un proyecto global y es en 2008 cuando las actuaciones en materia de sostenibilidad se generalizan y se aplican a nuestros 350 hoteles en 22 países.
Tenemos un compromiso con la sociedad y con los accionistas y queremos apostar por esta materia. Es el momento de que nuestro compromiso lo hagamos público y además queremos adelantarnos ocho años al famoso Plan 20-20-20 que va ser una realidad para la Unión Europea en 2020, la fecha que se ha marcado para reducir sus emisiones contaminantes un 20% y mejorar la eficiencia energética en otro 20%. Pero nuestro compromiso se traslada también a todos los países en los que estamos presentes.
¿Qué presupuesto se dedica en NH Hoteles a actuaciones en materia de sostenibilidad?
No hay un presupuesto asignado sino que el proyecto de sostenibilidad tiene diferentes áreas como puede ser la reducción de los consumos de energía. En este sentido, contamos con un programa de monitorización de los hoteles muy importante a través del cual hacemos un benchmark interno de cada uno de los establecimientos.
A veces no es necesario gastar más dinero sino invertirlo mejor. Por ejemplo, cuando se nos estropea una caldera que tiene 20 años, antes sustituíamos la caldera y poníamos otra, mientras que ahora intentamos poner la más eficiente. No gastamos más dinero, pero lo que se nos exige es que la prioridad de la ecoeficiencia esté siempre presente en la toma de decisiones. Antes se tomaban las decisiones en función de otros parámetros y ahora, a éstos, le añadimos la verificación de que la caldera es la más eficiente que existe y que el payback es el que tiene que ser.
¿Realmente un cliente elige un hotel por su política de sostenibilidad?
Lo va a eleigir. A día de hoy, lo que quiere el cliente es que el hotel sea cada vez más sostenible. Esto está en la cultura. En una encuesta que hicimos a los clientes, el 92% de ellos estaban preocupados porque los hoteles fueran más sostenibles. En el segmento MICE, sobre todo, los clientes internacionales organizadores de eventos demandan un plan medioambiental del hotel. Empieza a haber demanda de este tipo y es cuestión de que este pensamiento se vaya aplicando a otro tipo de cliente hasta llegar al cliente individual.
¿El cliente español está menos preocupado por la sostenibilidad que los clientes de otros países, principalmente europeos?
Cuando hicimos la encuesta en algunos de los países en los que la compañía está presente, el nivel de coincidencia en las respuestas entre nuestro cliente tipo, que es mayoritariamente un cliente de empresa, fue muy alto. A lo mejor Alemania podía estar en el 98% y España en el 92% pero el gap es muy pequeño. A priori, podemos tener la opinión de que a los españoles no nos preocupa la sostenibilidad o el medio ambiente pero creo que la realidad es que hacemos más cosas de las que creemos.
En Alemania a lo mejor son más proactivos y aquí lo que necesitamos es que las cosas nos vengan un poco mejor dadas. Por ejemplo, cuando yo le ofrezco un bolígrafo biodegradable a un cliente, lo valora muchísimo y a lo mejor no me lo había pedido expresamente pero cuando lo ve escribe con él en vez de con uno de publicidad que no tiene estas características.
¿Hay algún cálculo sobre el ahorro en euros que pueden suponer para la compañía este tipo de actuaciones?
Con 350 hoteles y 22 países es difícil. Lo que sí podemos decir es, por un lado, que, cuando acometemos inversiones, éstas tienen un retorno aproximadamente de menos de 3 años y el plan tiene que producir eficiencias pero depende de variables como la ocupación o los costes de la energía. Es verdad que tenemos una proyección para el futuro pero ésta puede ser a corto plazo o en un plazo más amplio porque la evolución, por ejemplo, de los costes de la energía, está fluctuando mucho.
¿En qué consiste el concepto de ‘ecodiseño’ que aplica la cadena en sus hoteles?
Puede parecer que nos limitamos a construir los hoteles orientando las ventanas de alguna forma determinada, que sí lo hacemos cuando se puede ya que muchas veces estamos en el centro de las ciudades. Pero también rehabilitamos muchos edificios y somos muy conocidos por nuestra renovación de palacios y aquí se pueden aplicar medidas de corrección interior. Pero nosotros lo llevamos más a fondo: el bolígrafo biodegradable, la bolsa biodegradable o, cuando vamos a diseñar la cocina, nos preocupamos por el material o la superficie porque, dependiendo de esta variante, por ejemplo, la limpieza va a ser más fácil y se van a emplear más o menos productos. Las habitaciones actuales, comparadas con las de hace tres o cuatro años, gastan un 70% menos de energía y un 40% menos de agua. Hay muchos proyectos, hay un área de Medio Ambiente en NH que trabaja conjuntamente con otros departamentos desarrollando los proyectos, aplicando la variable ‘ecodiseño’ y pensando en el ciclo de vida útil de los productos.
Por ejemplo, a la hora de diseñar un hotel pensamos dónde va la cocina y dónde va el restaurante porque esto tiene que ver con las rutas que hacen los camareros. Hay una serie de cuestiones que, cuando entras en detalle, te das cuenta de que, si empiezas a aplicar la variable de ecoeficiencia, produce eficiencia y no tiene por qué costar más dinero porque es más una cuestión de preocupación. Por ejemplo, a la hora de elegir las ventanas de un hotel no todas tienen por qué ser iguales porque una fachada puede estar orientada al sur y otra al norte o no es lo mismo que un hotel esté en Sevilla o en Nuremberg.
¿Cómo es el proceso de selección de proveedores por parte de NH Hoteles para elegir a los más respetuosos con el medio ambiente?
Hay dos fases. La primera se aplica al 100% de ellos y consiste en que todos los proveedores que el departamento de Compras analiza para los diferentes proyectos de la cadena deben completar un cuestionario de sostenibilidad con el que se miden los estándares que cumple y cuán sotenible es. Qué garantías aporta a la compañía de que está cumpliendo ciertas normativas y qué nivel de innovación en la parte medioambiental tiene.
Después hay una segunda fase en la que los proyectos más importantes pasan el filtro del ‘ecodiseño’: si es el más eficiente, la durabilidad del producto, los materiales que utiliza, sus posibilidades de reutilización, etc. Este proceso de evaluación arroja una serie de puntuaciones y, desde el área de Medio Ambiente se transmite esa información al área de Compras para que sirva en su proceso de selección.
¿Están concienciados los proveedores o se elige al ‘menos malo’?
Están evolucionando de una forma rapidísima y las empresas están viendo que aquí hay una oportunidad. Tanto es así que hemos creado un club, el Club de la Sostenibilidad, al que los proveedores más innovadores se asocian con nosotros y en el que todas las compañías se conocen y así juntos podemos innovar. Tenemos unas inquietudes que trasladamos a los proveedores y ellos, junto con nosotros, innovan. Esa innovación se va a trasladar, por ejemplo, a nuestro bolígrafo biodegradable. Queremos hacer un bolígrafo mejor hasta que conseguimos un proveedor que consigue transformar ese material y conseguimos ese bolígrafo biodegradable con un precio adecuado y unos estándares de garantía. Siguiendo con el ejemplo, en este caso podemos ser los primeros, pero esta iniciativa puede servir para que, más adelante, otras empresas puedan comprar este bolígrafo con garantías.
¿En materia de sostenibilidad, cree que prima la apariencia sobre las actuaciones concretas y reales?
En el Sector, y no sólo en éste sino en muchos, creo que así es. En nuestro caso esto va en el concepto de la compañía y del Consejo y está dentro de la conciencia de la cadena y de los trabajadores. En este sentido, también hicimos una encuesta a nuestros trabajadores y nos sorprendimos de que están muy preocupados por esta cuestión. En su momento, NH fue la empresa que tenía que ver con la innovación y el servicio y ahora añadimos la sostenibilidad.
¿Cuentan con algún tipo de ayuda por parte de la Administración para estas iniciativas?
Todas aquéllas que convoca de manera oficial y a las que nosotros intentamos acceder. Si somos merecedores de ellas se nos conceden y cuando no, no se nos conceden. Aquí y en otros países como Italia u Holanda solicitamos esas ayudas de los Gobiernos.
¿Cree que debería implicarse más u ofrecer más facilidades?
Este es un Sector que necesita motivaciones y, en nuestro caso, indistintamente de que haya o no subvenciones, vamos a trabajar en ello pero si éstas fueran más accesibles o hubiera más habría otros pequeños hoteleros a los que les motivaría avanzar en sostenibilidad en un Sector tan importante para España y Europa como éste.










