El proceso de fusión entre Vueling y Clickair parece estar más cerca de concluirse que nunca. Al menos así se desprende de las afirmaciones pronunciadas por ambas partes. Si hace tan sólo unos días, era el presidente de Vueling, Josep Piqué, quien confirmaba que "prevemos cerrar la operación de fusión antes del verano", ahora es uno de los accionistas de Clickair, ACS, quien apunta que el proceso de fusión concluirá "en no mucho tiempo". Así lo ha manifestado el director general corporativo del grupo constructor, Angel García Altozano.
Al respecto, los accionistas parecen dispuestos a "permanecer en el accionariado de la compañía resultante", como confirman desde la constructora que preside Florentino Pérez, poseedora de un 20% de participación en el accionariado de Clickair. Por su parte, el consejero delegado de Agroalimen, Artur Carulla, —dueño de un 20% del accionariado de Clickair— ha subrayado la existencia de "acuerdos" entre ambas y que "el cierre definitivo de la fusión llegará en unos dos meses".
De hecho, ya existen rumores acerca de la creación de un principio de acuerdo entre ambas partes, por el que Iberia y el resto de socios de Clickair se quedarán con el 55% de la aerolínea resultante, mientras que el 45% restante permanecería en manos de Vueling. No obstante, desde ambas compañías no confirman dicha información, no antes "de que sea comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)", como afirman fuentes de Vueling.
Más valor ‘en conjunto’ que por separado
Tanto los socios como las propias compañías aéreas están convencidas de que su integración "contribuirá para generar más valor que por separado". De hecho, el presidente de Vueling no ha tardado en afirmar que la low cost resultante sería "la mayor aerolínea de ‘bajo coste’ que existiría actualmente en el mercado nacional".
En el panorama aéreo actual, en el que existe "una situación de tremenda competencia, casi de competencia perfecta", asegura el presidente de Vueling, "el beneficio del conjunto tiende a cero permanentemente". Es por ello que la fusión entre ambas aerolíneas low cost responde a una necesidad del mercado, en cuanto que "debemos tender a ganar en dimensión y reducir el número de actores en el mercado y, desde luego, no es sostenible la actual situación de precios", a juicio de Piqué.








