Una de las principales máximas que rigen en el fútbol, tan en boca de todos en estos días, y en muchos otros órdenes de la vida, reza que "aquello que funciona, mejor no tocarlo". Pero en el caso del transporte de viajeros por carretera, parece que el mensaje no ha llegado, o no ha calado lo suficiente entre buena parte de sus integrantes. De otro modo, no se entiende el eterno debate que se genera alrededor de los nuevos pliegos para los contratos de gestión de servicios públicos de transporte regular de uso general de viajeros por carretera. Cuando parece que Fomento lo publicará, las asociaciones amenazan con denunciarlo y Competencia entiende que se puede producir una "renta monopolística" para los concesionarios.

