Entre enero y septiembre, Mallorca recibió 10,8 millones de turistas internacionales
El sector hotelero de Mallorca encara 2026 con una fortaleza empresarial consolidada y altamente competitiva. Tras más de una década de inversión continuada, el sector transformó la oferta, diversificó productos y logró influir en la demanda, operando en nuevos segmentos que contribuyeron a extender la temporada turística. Como resultado, Mallorca se situó en una posición más sólida para competir en el ámbito global.
Por tercer año consecutivo, uno de cada cinco hoteles permanece abierto todo el año, el doble que antes de la pandemia, mientras que seis de cada 10 operan entre febrero y noviembre. En febrero estará activa casi la mitad de la planta hotelera, y en marzo el 70 %. “Estos datos confirman que la ampliación de la temporada no es coyuntural, sino estructural, fruto de la inversión y de una gestión profesional y eficiente que ha consolidado la estabilidad del sector. Nos hemos reposicionado porque hemos invertido, y lo hemos hecho con método y visión de largo plazo. Lo importante no es crecer más, sino hacerlo mejor”, afirmó Javier Vich, presidente de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), durante la World Travel Market (WTM) de Londres.
Entre enero y septiembre de 2025, Mallorca recibió 10,8 millones de turistas internacionales (casi un +3%), que generaron 13.480 millones de euros en gasto (+6%), reflejo de una mayor contribución por visitante gracias a un modelo sólido basado en la diversificación, la profesionalización del sector y la apuesta por segmentos de alto valor —como el deportivo, el cultural y el MICE—, especialmente durante el primer trimestre del año, donde se produjo el mayor crecimiento.
Rentabilidad del mercado
El gasto medio por persona alcanzó los 1.248 euros (+3%), mientras que el gasto medio diario se situó en 200,5 euros (+3,8%), superando por primera vez el umbral de los 200 euros. El archipiélago mantuvo así su liderazgo nacional en gasto turístico, situándose un 30 % por encima de la media española, que fue de 156 euros por día (+4 %).
“Hemos aprendido a generar más rentabilidad con el mismo número de pernoctaciones. Esto es eficacia no euforia, y es lo que consolida la voluntad de rebajar la curva del tercer trimestre y engrosarla en el primero y el tercero”, señaló Vich, quien añadió: “El mercado reconoce el valor del esfuerzo que hacemos. Mallorca no debe buscar crecer más, sino crecer mejor: generando más valor, más empleo estable y más prosperidad compartida para todo el territorio”.
En contraste, aunque el incremento de pasajeros aéreos fue notable, este aumento no se tradujo en más pernoctaciones hoteleras, que apenas crecieron salvo en los trimestres de inicio y final de año. La estancia media resultó algo más corta, y desde el sector se insistió en que el gran objetivo debía ser prolongarla.

