Las compañías aéreas concluirán 2012 con un beneficio de 2.380 millones de euros, lo que supone un descenso del 62% respecto a 2011, cuando obtuvieron un balance positivo de 6.270 millones de euros. Pese a este recorte, la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) considera que la cifra es positiva, teniendo en cuenta que en la anterior previsión se vaticinó que, en caso de continuar la escalada del precio del combustible, el conjunto de las aerolíneas podrían finalizar 2012 con pérdidas.
Según explica el consejero delegado de la IATA, Tony Tyler, "la demanda ha sido mejor de lo esperado en lo que va de año y los precios del combustible son ahora más bajos". No obstante, muestra su preocupación por la crisis de la euro zona, ya que a su juicio podría poner en peligro la mejora de la rentabilidad. En el caso concreto de Europa, el directivo advierte de que "para las compañías aéreas del continente el entorno empresarial se está deteriorando, dando lugar a pérdidas importantes".
Segundo año negativo para el sector aéreo
De confirmarse la previsión de IATA, se trataría del segundo año consecutivo en el que los beneficios de las aerolíneas registran un fuerte recorte. Así, ya en 2011 bajaron un 50% respecto a 2010, ejercicio en el que las ganancias se situaron en 12.536 millones de euros. Igual de preocupante es la reducción del margen de beneficio, que podría reducirse este año hasta el 0,5%, ocho décimas por debajo que en 2011 (1,3%) y un 2,4% menos que en 2010.
En lo que respecta a la facturación, el lobby aéreo espera que el sector alcance una cifra de negocio de caso 500.500 millones de euros. Por su parte, el resultado de explotación podría situarse en 6.824 millones de euros.










