La segunda fase de los ‘cielos abiertos’ es ya una realidad. El Consejo de Ministros ha aprobado la firma del protocolo por el que se modifica el acuerdo de transporte aéreo entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos (EEUU), firmado en abril de 2007. Asimismo, ha autorizado su aplicación provisional, antes de su remisión a las Cortes Generales. Este acuerdo, que se viene aplicando desde el 30 de marzo de 2008, supuso la primera fase en la creación de un marco regulador armonizado para el transporte aéreo, superando los acuerdos bilaterales de los distintos Estados miembros y EE UU.
No obstante, el propio acuerdo preveía un desarrollo progresivo para profundizar en la apertura de los dos mercados. En marzo del año pasado, bajo la presidencia española de la UE, se concluyó el diseño de la segunda fase del proyecto, con la que se busca "la profundización de la política aperturista e innovadora de ‘cielos abiertos’ en el transporte aéreo mundial", apuntan desde el Gobierno. Entre los cambios introducidos, destacan los dirigidos a limitar el impacto de la aviación en el cambio climático a través de la innovación y de una mayor coordinación. Asimismo, se eliminarán barreras de acceso al mercado y se buscará dar un impulso de las ventajas para consumidores, compañías aéreas y trabajadores.
Aumento de 25.000 millones en la factura de combustible
Más allá del acuerdo suscrito por el Gobierno español, el sector aéreo afronta un 2011 marcado por el encarecimiento del petróleo. Así lo ha advertido la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), estimando que la factura por combustible se incrementará en torno a 25.000 millones de euros. La escalada de los precios del crudo podría "dañar gravemente" a un sector que "había comenzado a levantar el vuelo", apunta el presidente de IATA, Giovanni Bisignani. En este sentido, recuerda que la actual estimación de beneficios del sector, de unos 6.574 millones de euros, están basadas en un escenario de precios de 84 dólares el barril, frente a los más de 100 dólares en los que se ha situado.
Ante esta situación, algunas aerolíneas, como es el caso de British Airways, ya han anunciado un aumento del recargo por combustible. Según apuntan desde la compañía aérea británica, recientemente fusionada con Iberia, se aplicará esta subida desde hoy para los vuelos de largo radio "debido al aumento continuado y sustancia del precio del crudo y el incremento del 14% en el precio del combustible para aviones desde la aplicación del último recargo, en diciembre de 2010".









