El consejero ha recordado que ya en 2006 la Junta de Andalucía ejerció su derecho de retracto para intentar recuperar ese espacio del Parque Natural del Cabo de Gata y "devolverlo a su estado original". Si bien ha reconocido que las acciones judiciales abiertas, más de una veintena, han impedido acometer la demolición. "La voluntad de la Junta de Andalucía es recuperar el espacio", ha insistido Díaz Trillo, para el que no deben existir dudas acerca de esa posición, que aboga por el derribo.
Sus declaraciones se producen después de que una docena de activistas de Greenpeace hayan instalado una "delegación temporal" de la organización ecologista en el conocido hotel "ilegal" de El Algarrobico, en Almería. Con esta acción de "denuncia pacífica", Greenpeace quiere pedir al Gobierno central y a la Junta de Andalucía que firmen un acuerdo "que sea rubricado en el Consejo de Ministros del próximo viernes, día 9, en el que se comprometan al inmediato "derribo del hotel". La organización ecologista reclama, además, que la Junta de Andalucía "se retire de todos los pleitos donde defiende que la parcela de El Algarrobico es urbanizable".
Compromiso por escrito
Los activistas, que permanecerán en esta nueva delegación "100% sostenible y respetuosa con el medio ambiente" hasta que exista un compromiso por escrito de las administraciones, están desplegando una pancarta de 30 metros con el mensaje ‘¿A qué esperan?’ y, según han anunciado, realizarán diferentes actividades "para mejorar la imagen del edificio, para lo que contarán con la colaboración del artista 3ttman".
Greenpeace ha recordado que el pasado lunes se cumplieron tres años desde que una sentencia declarara ilegal la licencia de obras del hotel que, según lamentan, "la Administración está utilizando para eludir sus responsabilidades, ya que la ha recurrido sucesivamente para alargar el proceso de derribo". Ante ello, la organización ecologista se ha dirigido por fax a la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, así como al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, para pedir la "inmediata" demolición del hotel.
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