El plan mantiene la línea de contención del gasto de los últimos ejercicios, al tiempo que plantea incrementos en los metros comercializados, subida en la facturación por servicios y en la venta de eventos, así como la puesta en marcha de nuevos productos. También prevé la paulatina adecuación de las tarifas a la calidad de los productos feriales.
Por lo que al gasto se refiere, la Feria de Valencia ha puesto en marcha una serie de medidas que permitirán que en 2013 los gastos de mantenimiento caigan un 58% con respecto a los de 2010. Además, los diferentes ajustes realizados en materia laboral también han rebajado en torno a un 47% los costes laborales.
Por la parte de los ingresos, se prevé un crecimiento del 5,8% anual hasta 2020. Esta subida se logrará con crecimientos del 5,9% en ferias, del 4,8% en los ingresos de estructura y del 1,8% en los de la central de servicios. Sobre los metros comercializados, el plan prevé un crecimiento del 2,3% anual, gracias a la creación de nuevas ferias y al incremento de la colaboración con organizadores externos.
El nuevo plan de negocio de la Feria de Valencia supone un cambio de modelo en la explotación del negocio ferial. La Feria de Valencia pasa de ser solo un gestor de un recinto a ser el gestor de sus clientes expositores y visitantes, siempre para buscar una mejora en la calidad de los productos que redunde en beneficio de los clientes de la empresa y de los resultados de la propia institución.
Política de recuperación de precios
En ese marco de mejora de la calidad de los productos de la Feria de Valencia también se va a poner en marcha una política de recuperación de precios. Así, conforme aumente el valor de los certámenes de la Feria de Valencia, sus precios irán creciendo en paralelo, con el objetivo de que en 2020 la tarifa media sea similar a la de 2008. El cumplimiento de este plan de negocio permitirá a la Feria de Valencia volver a los beneficios en 2015.
El patronato de la Feria de Valencia también ha aprobado las cuentas de 2011 que arrojan un resultado negativo de 7,6 millones de euros. En un entorno económico muy complejo, la rebaja del gasto logrado en ese ejercicio, del 29,30%, no ha sido suficiente para equilibrar el resultado de explotación.
El máximo órgano de gobierno de la Feria de Valencia ha mostrado su apoyo al plan de negocio presentado. Para el presidente del comité ejecutivo de la institución, Alberto Catalá, "estamos ante un plan realista en el que se ha querido marcar cuál va a ser el suelo de actuación de la institución". Catalá considera que la situación económica actual está dominada por la incertidumbre, "lo que hace necesario que abordemos el futuro con el mayor realismo posible, para que cualquier mejora que se pueda lograr sobre el plan trazado abunde en la estabilidad de la compañía".











