La familia Calero tiene la intención de desprenderse del 6,5% que posee en Sol Meliá, valorado en más de 182,9 millones de euros. Con la venta de estas acciones espera obtener mayor liquidez para incrementar de forma notable las inversiones en su cadena Vinci. ING Bank, entidad financiera encargada de la operación, ha realizado una ‘colocación acelerada’ para estudiar el interés que suscitan los 12 millones de acciones, con un resultado bastante positivo. Los dueños de Vinci obtuvieron estas acciones en el año 2000 como forma de pago (junto a un montante económico) tras vender Hoteles Tryp.









