«Hemos hecho todo lo que ha estado en nuestra mano, pero en estas montañas las condiciones climatológicas y el propio estado de la nieve y el hielo son los que deciden finalmente si se puede subir, o no, a la cima», ha señalado Soria desde el Campo III del Dahulagiri. «Finalmente no ha podido ser», ha añadido.
Desde Ifema, a pesar del contratiempo meteorológico y de la imposibilidad de haber alcanzado la meta, se han mostrado muy honrados de haber impulsado un proyecto que cumple con los propios objetivos de la institución, encarnados por Carlos Soria, y que pone al esfuerzo, la constancia y la tensión por lograr los objetivos, en la cumbre de su propia filosofía y actividad.
«Con el pesar de que el esfuerzo y la dedicación con que se ha emprendido cada una de las distintas etapas de la Expedición Ifema-Carlos Soria, no hayan tenido finalmente su merecida recompensa, desde Ifema queremos expresar nuestro apoyo y reconocimiento a nuestro alpinista más internacional, por su valor como deportista y por su nobleza humana. Ha sido una maravillosa experiencia haber podido impulsar esta aventura y unir el nombre de Ifema al de un personaje extraordinario», ha destacado el presidente del Comité Ejecutivo de Ifema, Clemente González Soler.











