La representante sindical ha explicado que el hotel continúa sin los servicios mínimos y, de hecho, no tiene agua, luz ni gas, un motivo por el cual, tras la visita de la Inspección de la Delegacion, se constató que no ha habido avances en este sentido y se denegó el ERE temporal.
Así, el plan de viabilidad acordado contemplaba que el inicio de la suspensión de contratos quedaba supeditada en su totalidad a que se produjera la efectiva apertura del hotel "con capacidad real para los servicios que, según su categoría, tiene la obligación de mantener conforme a la normativa de Turismo de Andalucía, con la prestación efectiva para los trabajadores afectados por el expediente".
Además, incluía el reconocimiento de la deuda individual contraída con cada uno de los 180 trabajadores y un plan de pago por el que el propietario del hotel, Ernst Malyshev, aportaría 180.000 euros, de forma que a partir de la apertura del establecimiento los empleados irían recibiendo lo adeudado en pagos sucesivos hasta el mes de diciembre, cuando estaba previsto el abono total de la deuda.
La alternativa ‘más inmediata’
Sin embargo, la "buena noticia" que suponía para los trabajadores este ERE temporal no se ha producido y Villalba ha recordado al respecto que la aprobación de este expediente era la alternativa "más inmediata" para que los empleados pudieran acceder a la prestación por desempleo.
El pacto alcanzado fijaba que el ERE temporal tendría una duración de cuatro meses y que el personal no afectado por él, que asciende a 72 trabajadores, desarrollaría su actividad, mientras que el resto de empleados serían readmitidos a su puesto en función del volumen de trabajo y por antigüedad y categoría.









