Los short breaks, o estancias de fin de semana, parecen estar acusando más los efectos de la crisis que otras modalidades de viaje. Un 17% de los españoles encuestados afirma haber viajado en estas circunstancias durante 2008, frente al 29% del pasado año. Sin embargo, las estancias más largas sí han crecido, a juicio de los consultados: Un 22% en 2007, frente al 26% de este año.
Según la encuesta realizada por Simple Lógica, en colaboración con la Asociación Española de Directores de Hotel (AEDH), entre algo más de 1.000 españoles, el descenso del uso de hoteles entre la población se manifiesta de forma similar en ambos sexos. Las estancias de los hombres cayeron en 11 puntos porcentuales, frente al 12% de las mujeres.
En términos de edad, los rangos de 18 a 30 años, de 31 a 40 y de 41 a 50 años también han caido en torno al 10% en el uso de establecimientos hoteleros, según afirman. En el caso de los mayores de 50 años, este descenso remite hasta el 7%, pasando del 47% en 2007 al 40% de este año.
Las diferencias se notan también en función del nivel académico de los encuestados, mostrando una correlación inversa entre la formación y las estancias hoteleras. Quienes menor nivel poseen, más han acentuado la caída: Del 39% en 2007, al 20% durante 2008. En cambio, el 64% de quienes tienen título universitario afirman haber hecho uso de un establecimiento durante este año, frente al 70% del pasado.
Más estancias de mayor tiempo
En el año 2008 el 17,5% de las personas encuestadas indican haber estado en un hotel por vacaciones con una estancia superior al fin de semana, el 16,5% por vacaciones en estancias de fin de semana, el 8,2% por ocio u otros motivos diferentes a los vacacionales y el 4,8% por negocio, frente al 7,5% del año pasado.










