La cadena ha explicado que este cambio supone una adaptación de los hoteles a los atributos de la marca Meliá, caracterizada por su "excelente servicio y atención al cliente" y que ha significado una "revalorización" de la zona como destino turístico.
El nuevo Meliá Coral dispone de 244 habitaciones, 6 suites de lujo y distintos espacios para eventos de empresa, así como una oferta complementaria que incluye spa, piscina o solarium.
Por su parte, el Meliá Istrian Villas es un complejo de apartamentos frente al mar, situado a dos kilómetros del centro de Umag, que combina la arquitectura tradicional con un diseño "moderno de máximo confort".










