Del total de vuelos cancelados ayer, 180 conexiones correspondían a rutas domésticas y más de una treintena a conexiones entre Madrid-Barajas y las principales capitales europeas, como Lisboa, París, Londres, Bruselas, Ámsterdam o Frankfurt. Asimismo, se han suprimido vuelos intercontinentales a Nueva York, Sao Paulo y Buenos Aires. En cuanto a la jornada de hoy, está previsto que se cancelen un total de 210 vuelos.
Iberia se ha mostrado abierta a negociar con los representantes sindicales mayoritarios de los tripulantes de cabina, que han convocado paros para los días 10 y 11 de noviembre. Por su parte, la Federación Andaluza de Consumidores en Acción (Facua) aconseja a los usuarios afectados por la huelga de Iberia que reclamen compensaciones económicas e indemnizaciones por daños y perjuicios, y pide al Gobierno que "no escurra el bulto" y que intervenga para defender los derechos de los pasajeros. La Federación recuerda que las reclamaciones deben dirigirse a la compañía aérea, "en el caso de haber contratado únicamente el vuelo de Iberia", o a la agencia de viajes y a Iberia, en el supuesto de viajes combinados.
Air Comet asegura que pagará las nóminas
Por su parte, Air Comet está cerrando con una entidad financiera una línea de financiación que le permita pagar las nóminas de hasta cinco meses que adeuda a los trabajadores y que ascienden a los 4,7 millones de euros. Desde el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) señalan que la compañía aérea les ha comunicado que el impago de nóminas se debe "al contexto macroeconómico que atraviesa el país". "El único plan que nos ofrecen es un crédito con subvenciones exteriores", apunta el representante del Sepla, Pedro Baceira, quien además recalca que "es un crédito que debería haber llegado desde hace meses". Según explica, la compañía les asegura que el crédito llegará mañana, pero los trabajadores son escépticos.
Por último, 14.000 tripulantes de cabina de British Airways, que sigue negociando con Iberia por una posible fusión, están estudiando la posibilidad de realizar paros para protestar contra los nuevos contratos que la aerolínea británica está estudiando imponer. El sindicato Unite "va a someter a votación ante los tripulantes de cabina de British Airways la realización de acciones industriales", apunta el secretario general de Unite, Derek Simpson. Simpson acusa a la dirección de la compañía aérea de querer imponer unos "inaceptables" cambios en las condiciones contractuales que "no dejarían alternativas" a los tripulantes de cabina.









