La compañía aérea apunta que en el pasado ejercicio sus ingresos cayeron aproximadamente un 1,3%, hasta colocarse en 5.450 millones de euros. Por otro lado, el beneficio antes de amortizaciones y alquiler de flota (Ebitdar) baja un 46,4% y se situaba en 499 millones de euros. Por su parte, el beneficio neto de explotación (Ebit) ajustado, retrocede un 91,2%, con lo que queda establecido en 36 millones de euros.
Durante el pasado ejercicio, la aerolínea registraba un descenso de 1,6 puntos porcentuales en su factor de ocupación global, que se situó en el 80%. No obstante, los costes de carburante se ha disparado por el alto precio del combustible, que ha provocado un incremento de los gastos de petróleo en un 45,5%. En cuanto a 2009, desde la aerolínea española aseguraban que contarán con una estructura financiera "fuerte" y reducirá los costes, gracias entre otras cosas al descenso del precio del petróleo.
Por otro lado, Iberia celebraba ayer su ‘Investors Day’ en el que presentaron el Plan Director 2009-2011 que prevé objetivos como el de promover la posición de la compañía aérea en el proceso de consolidación del sector aéreo, la adaptación de la red de rutas según la demanda, la contención de los costes y la potenciación de la eficiencia. "Son objetivos ambiciosos, pero son necesarios para competir", recalcaba el presidente de Iberia, Fernando Conte. "Hemos creado un nuevo plan de negocio con unos objetivos que permitirán recuperar la rentabilidad entre 2009 y 2011", indicaba el director comercial de Iberia, Manuel López Colmenarejo.









