Aunque el Turismo está experimentando las consecuencias de las crisis económica mundial, algunos segmentos, como por ejemplo el de los viajes de lujo, parecen mostrar, al menos hasta el momento, una mayor resistencia. Así lo pone de manifiesto el último estudio Luxury Report 2008/2009, presentado recientemente por Pangaea Network, en el que se advierte una cierta disparidad entre los diferentes mercados, aunque la gran mayoría no registran caídas.
En el caso de España, país en el que el mercado de viajes de lujo ha crecido en los últimos años entre un 15% y un 20%, este segmento turístico se mantiene estable pese a la crisis. Según el estudio, la mayoría de los turoperadores aseguran que los datos de reservas son similares a los de años anteriores, aunque advierten que los viajes de luna de miel sí se verán afectados. Pese a esta estabilidad, "los proveedores de viajes de lujo están adaptando sus productos ofreciendo una mejor oferta en el precio de sus hoteles para satisfacer las demandas del consumidor".
Buen comportamiento en el mercado alemán
Del resto de Europa, las evoluciones distan mucho entre unos países y otros. En Reino Unido se muestran cautelosos a la hora de lanzar previsiones de cara al 2009 debido a que en los últimos meses las reservas de esta clase de viajes han sufrido un ligero descenso. Por lo tanto, se espera que este segmento registre un ligero decrecimiento. En Francia, pese a la tendencia al alza de los últimos años también se espera un descenso de los viajes de lujo. Comportamiento diferente muestra Alemania, en donde los consumidores siguen disfrutando en la misma medida de esta clase de viajes, aunque reduciendo sensiblemente la calidad de los mismos.
De los demás continentes, destacan los comportamientos dispares de Estados Unidos y Oriente Medio. Mientras que los norteamericanos ahorran costes en los vuelos y hoteles, Oriente Medio continúa siendo visto como una oportunidad de negocio para los grupos hoteleros de lujo. El estudio Luxury Report 2008/2009 también subraya que cada vez más proveedores de lujo se instalan en Brasil, Rusia, India y China, gracias a su consolidación como las cuatro grandes potencias emergentes.










