Para ello, el Palacio de Congresos busca poner en valor la dieta mediterránea. Proponen alimentos de proximidad, dando prioridad a las verduras, hortalizas y frutas para adaptarlas tanto a recetas con historia como a las internacionales, según las necesidades actuales de los clientes, que cada vez buscan una gastronomía más saludable.
Asimismo, buscan presentar los alimentos en una innovadora y original puesta en escena. La sinfonía cromática de los alimentos, la textura en boca, el aroma y el contraste de sabores «despiertan los sentidos de los clientes». Quieren unir la calidad de los alimentos con la estética a la hora de presentarlos, con el objetivo de conseguir el máximo confort y diversión entre los clientes.
Otra de los objetivos es el networking y experiencias únicas en el edificio. Lo harán mediante las estaciones de mercado, invitando al público a desplazarse a cualquier lugar del área de exposición y recorrer todos los estands. De esta forma, facilitarán la relación de los asistentes mientras comen. En línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el packaging de la comida para llevar será de material reciclado, una de las numerosas acciones que están desarrollando para próximos congresos. También trabajarán en la reducción del plástico.









