El galardón tiene como objetivo destacar el trabajo de profesionales contemporáneos que han hecho uso de las piedras naturales españolas en construcciones de todos los géneros, en las que la singularidad, la innovación, las técnicas de aplicación o la estética así lo acrediten.
La obra premiada, diseñada por los arquitectos Jesús Ulargui Agurruza y Eduardo Pesquera González, está inspirada en la arquitectura de las iglesias y de los patios de las casas ibicencas. El singular edificio constituye una evocación de la cultura, diversidad, tolerancia y libertad del pueblo pitiuso, según ha informado la FDP.
El edificio cuenta con un centro cultural inspirado en la esencia natural de la isla, con un amplio espacio iluminado por la luz natural que captan los lucernarios estratégicamente colocados: dos hacia la sala de exposiciones, uno en el salón de actos y otro sobre el patio, desde donde se divisa una panorámica del bosque de pinos mediterráneos que envuelve el edificio.








