Ante el temor a un posible retroceso conservador, Jebali ha intentado tranquilizar a hoteleros, agentes de viajes y a los más de dos millones de tunecinos que directa o indirectamente trabajan en este Sector. "No habrá limitaciones, ya que no podemos dejar pasar la oportunidad de potenciar un sector tan importante para nosotros como el Turismo, que supone el 7% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional, pero sí variaremos nuestra oferta como destino", destaca.
La entrada de turistas a Túnez desde enero, una vez el presidente Ben Alí salió del país, ha descendido un 33,3%, hasta los cuatro millones de visitantes. De este modo, se han perdido unos dos millones de viajeros en comparación con el año anterior. En lo que respecta al mercado emisor europeo, han llegado al país 1,9 millones, un 45,1% menos.









