La primera conclusión del encuentro profesional en el que participaron más de 450 expertos en la materia es que la calidad en el Sector turístico "no debe confundirse con el lujo", ya que se trata de una cuestión que hace referencia a "la garantía de la prestación del servicio al cliente y producto".
En segundo lugar, el ICTE considera relevante que España se ha consolidado como "referente mundial" en los procesos de normalización y certificación turísticas. "En consecuencia, debemos continuar liderando el proceso de la elaboración de normas turísticas de alcance mundial en el seno de ISO y buscar fórmulas de colaboración con otros países para acelerar los procesos de implantación de los sistemas de calidad en el Sector turístico", ha añadido.
Además, la tercera conclusión del encuentro sostiene que la ‘Q’ de Calidad se ha consolidado como la "gran marca de calidad del Sector turístico español". Así, el nivel de conocimiento de este certificado ya está provocando un "mejor comportamiento" en el mercado, tanto de los establecimientos certificados, como de los destinos turísticos que están apoyando "decididamente" la implantación de la marca en los diferentes subsectores de los territorios.
Las empresas certificadas se adaptan antes a los cambios
En el Congreso de Santander también se concluyó que la rapidez en la evolución de la gestión de establecimientos turísticos para dar respuesta a las nuevas fórmulas de distribución y comercialización, así como a las circunstancias económicas actuales, han puesto de manifiesto que las empresas certificadas con la ‘Q’ de calidad han tenido una "mayor capacidad de respuesta y adaptación a estos cambios" y que el sistema ha contribuido a "minimizar todos los elementos de riesgo".
Por último, para el Instituto presidido por Miguel Mirones se pone de manifiesto la necesidad de que las distintas Administraciones sigan apostando por la implantación y certificación de la marca ‘Q’ Calidad Turística, así como por su difusión.









