Lozano ha rechazado "cualquier posibilidad" de rescatar la empresa, que suspendió sus operaciones en agosto de 2010, como han solicitado los trabajadores de handling de la aerolínea en una protesta esta semana en el aeropuerto de la capital mexicana. Igualmente, ha negado que las autoridades mexicanas "apuesten a la quiebra de la empresa" para favorecer a otras aerolíneas del país.
El rescate es una figura legal que permite al Gobierno mexicano asumir el control de empresas estratégicas en riesgo de huelga y garantizar el servicio y la continuidad de sus operaciones. Mexicana se encuentra en un proceso de concurso mercantil, si bien varios grupos han mostrado su interés por participar en el plan de rescate impulsado por el Gobierno, entre ellas Avanza Capital, Iván Barona, Altus Prot y la mexicana TG Group.
El administrador de Mexicana ha ampliado el plazo para la presentación de los expedientes de los grupos interesados en adquirir la aerolínea con el fin de que puedan completar la documentación y evitar la quiebra de la aerolínea. Así, se ha fijado el 5 de agosto como fecha límite para agotar el concurso mercantil.









