El Gobierno estudia qué productos y servicios saldrán de la lista del IVA reducido (8%) o superreducido (4%). Según confirman desde el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, se está analizando ampliar las bases imponibles del impuesto, elevando así la recaudación, en línea con la recomendación de la Comisión Europea. Aunque aún se desconocen los productos y servicios cuyo IVA podría pasar al general (18%), entre los que se benefician del reducido están algunos englobados en el Turismo, como son la hotelería, restauración, transporte terrestre de viajeros y equipajes y el transporte marítimo y aéreo con Baleares.
A la espera de conocer si alguno de los servicios turísticos se verán afectados por esta medida, las agencias de viajes ya han mostrado su preocupación. Para el presidente de CEAV, Rafael Gallego, una medida de esta índole "supondría una terrible noticia", ya que provocaría " una pérdida de competitividad respecto a otros destinos". Además, considera que "al aumentar el costo se reducirá el gasto, por lo que probablemente la balanza de la recaudación del Estado quedaría equilibrada".
Asimismo, tal y como publicó NEXOTUR, el Sector Turístico advierte de que una subida del IVA les afectará "muy negativamente", especialmente si se produce en plena temporada de verano. Según el presidente de la Mesa del Turismo, Abel Matutes, esta medida supondría un "duro golpe para esta fábrica de divisas y empleo", por lo que considera "fundamental" que no se toque "para mantener la competitividad". También el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Juan Molas, asegura que "necesitamos que nos mantengan el tipo impositivo en el 8% para no perder más competitividad".
Límite a los pagos en efectivo a partir de 2013
Por otro lado, las mismas fuentes han asegurado que las medidas relativas al IVA incluidas en el plan de lucha contra el fraude aprobado el 22 de julio también sirven para ampliar las bases imponibles del impuesto al elevar la recaudación. En este sentido, esperan que el plan entre en vigor en enero de 2013 o incluso antes, ya que se trata de un "proyecto ambicioso" que dota a la Agencia Tributaria de buenas herramientas para evitar el fraude.
Esta iniciativa incluye medidas como la limitación del pago en efectivo entre empresas y entre particulares y empresas a 2.500 euros, medida que ha sido criticada por el Sector de agencias de viajes. Desde el Gobierno argumentan que la limitación del uso de efectivo, una medida que también han adoptado otros países, puede ser muy positiva, ya que no busca recaudar, sino evitar este tipo de conductas.









