Barcelona, que celebra este certamen desde 2006, compite con otras cinco ciudades para el periodo 2013-2017: Amsterdam, Colonia, Milán, Munich y París. El Govierno catalán ha expuesto que mantener el congreso en la capital catalana "permitiría favorecer la capacidad competitiva y la ocupación de calidad en Cataluña, impulsar la atracción de empresas y de talento, y facilitar la actividad emprendedora".
También favorecería "el desarrollo de la investigación y la innovación avanzadas, y el apoyo al sector turístico y a la consolidación de Cataluña como organizadora de grandes ferias y congresos". La Generalitat ha hecho un llamamiento a las empresas y agentes del sector de las tecnologías de la información y la comunicación para que se adhieran a un manifiesto de apoyo a la candidatura de Barcelona.
La iniciativa ha sido impulsada en el marco del Plan TIC.cat, elaborado por las consejerías de Gobernación e Innovación, Universidades y Empresa. En un correo electrónico enviado por el Gobierno catalán, la Generalitat destaca "la importancia" de que Barcelona siga acogiendo el congreso mundial de telefonía móvil más allá de 2012, y pide adhesiones al manifiesto. El Mobile World Congress reúne cada año a casi 50.000 profesionales de 200 países, más de la mitad altos directivos de las principales empresas del sector, así como a delegaciones gubernamentales.
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