El pasado sábado se han conmemorado 20 años de la puesta en servicio comercial de la primera línea AVE de España, la que une Madrid y Sevilla, que supuso la introducción en nuestro país de una nueva tecnología ferroviaria que ha rescatado al tren para el siglo XXI. Dos décadas después, España es primer país europeo por número de kilómetros AVE en servicio, y segundo del mundo sólo por detrás de China, con una red de 2.900 kilómetros, según datos de Adif.
De esta forma, el AVE ya une directamente a 27 ciudades y 19 provincias españolas, de forma que cuatro de cada diez ciudadanos cuentan con una estación AVE a menos de 50 kilómetros. El servicio de estos trenes, que presta la operadora pública Renfe, también se presenta como líder en velocidad, dado que es el más rápido del mundo, con una velocidad comercial media de 222 kilómetros por hora, superior a la de Japón y Francia con 218 y 216 kilómetros por hora respectivamente, y se distingue por su puntualidad, que roza el 99% y constituye uno de los aspectos más valorados por los usuarios.










