2009 ha sido el año en que más de un millar de agencias han tenido que echar el cierre y varios miles de agentes de viajes han perdido sus puestos de trabajo. Proceso iniciado en 2008 y que previsiblemente continuará en 2010. Aunque es impensable que el nuevo año mantenga el ritmo de cierres.
2009 ha sido el año en que muchos empresarios del Sector se han visto obligados a consumir sus recursos propios, perdiendo parte de todo su fondo de reserva, e incluso comprometiendo su patrimonio personal (al aportarlo como aval) para lograr que bancos y cajas les renovaran sus pólizas de crédito. Tensiones financieras que, es de prever, remitan durante el nuevo año.
2009 ha sido el año en que las guerras de precios y de descuentos han cercenado el margen de la agencia, condenando a las pérdidas a buena parte del Sector. Desplome de la rentabilidad que, visto lo visto, va a continuar siendo moneda corriente, desgraciadamente, el año próximo.
2009 ha sido el año de la mayor caída del consumo doméstico que se recuerda, con una fortísima contracción del mercado emisor próxima al 20% que, además, coincidide con una caída del receptivo que se cifra en torno al 10%. Unos resultados que, de repetirse en 2010, supondrían una debacle para un Sector exhausto, como el de la comercialización, que se sitúa ya al límite de la supervivencia.
2009 ha sido el año de la falta de liquidez, caracterizado por un retraso generalizado en los pagos, que ha puesto las tesorerías de las empresas al límite, y bajo la espada de Damocles de la morosidad. Amenaza que el nuevo año confirmará o despejará y que, en caso de materializarse, pondría en peligro la continuidad de muchas empresas viables.
2009 ha sido el año también de la caída en picado del transporte aéreo, situando en estado crítico (o, en el mejor de los casos, en pérdidas operativas) a todas las compañías aéreas españolas.
2009 ha sido el año del recorte de comisión por parte de algunos de los principales turoperadores, lo que dificulta la viabilidad de algunos Grupos comerciales y viene a depauperar todavía más el maltrecho margen de intermediación.
2009 ha sido el año en que la imagen que del Sector tienen los consumidores ha salido peor parada. Anuncios del 70% de descuento con un jamón ‘pata negra’ de regalo, trasladan al cliente final la falsa percepción de que el agente puede efectuar descuentos imposibles.
En suma, 2009 ha sido el annus horribilis del Sector. Un ejercicio que hará más fuertes a los supervivientes, pero que ha tenido uno enorme coste en desempleo, cierres de agencias, endeudamiento, caída del margen y pérdida de imagen, cuyos efectos no se pueden soslayar. Ojalá 2010 marque el punto de inflexión para todos.
Que le sea útil. Ese es nuestro mayor interés.









