Flanqueado por el ministro Sebastián y el secretario de Estado Mesquida, el presidente del Gobierno se sometió durante tres horas a una inmersión en la problemática sectorial. La "gran sensibilidad y receptividad" mostrada por Zapatero fue reconocida por los participantes, que enunciaron todo un rosario de medidas anticrisis, que incluye: rebaja del IVA, aplazamiento del pago a la Seguridad Social, congelación de tasas aéreas, créditos del ICO, mayor promoción exterior, agilización en la concesión de visados, rechazo al canon de TV y música en hoteles…
El Sector recordó la necesidad de preservar la unidad de mercado en el marco del Estado de las Autonomías y de coordinar la promoción con las Administraciones turísticas, así como las ventajas derivadas de impulsar un espacio aéreo único europeo, o la ampliación de los viajes del Imserso, entre otras medidas.
La participación de las agencias fue mayoritaria, al estar presentes los presidentes de CEAVyT y AEDAVE, José Manuel Maciñeiras, y de FEAAV, Rafael Gallego, a los que se sumaron otros agentes de viajes como el presidente del Consejo de Turismo de CEOE (Viajes Marsans), Gonzalo Pascual; el presidente de la Mesa del Turismo, Juan Andrés Melián (Viajes Insular); y los empresarios Juan José Hidalgo (Halcón Viajes Ecuador), y Simón Pedro Barceló (Barceló Viajes), aunque estos hicieron prevalecer su condición de transportista aéreo y de hotelero, respectivamente. Por tanto, a la vista de esta representación es justo subrayar la importancia que el Gobierno de España otorga a los agentes.
Era un secreto a voces, reiterado por personalidades de la política y la economía en reuniones con dirigentes turísticos, que tanto la Sociedad como el Gobierno dedicarían el interés que el Turismo merece, cuando el Sector entrara en crisis. Pues la crisis ya está aquí, aunque no afecte sólo al Turismo. Y la sensibilidad de los máximos líderes del Estado, también.
Nuestro Sector obtuvo del presidente el compromiso de lograr una mayor transversalidad y coordinación de las numerosas Administraciones relacionadas con la actividad turística (propuesta de AEDAVE), apostar por la gran marca-paraguas de España y agilizar los pagos pendientes de la Administraciones (propuesta de FEAAV). La celebración de un nuevo Consejo de Ministros monográfico de Turismo o el retraso del segundo Plan Renove, se añadió al repaso de las medidas gubernamentales.
La representación más numerosa correspondió a la hotelería, con el presidente de CEHAT, Juan Molas, y los máximos representantes de las grandes cadenas españolas, como Gabriel Escarrer (Sol Meliá), Carmen Riu (Riu), Gabrielle Burgio (NH), junto a los presidentes de los grandes grupos: Globalia (G H&R), Marsans (Hotetur) y Barceló. A los que se sumó el hotelero navarro Antonio Catalán, más por su declarada condición de amigo personal del presidente, que por el peso empresarial de AC. Contrastó la satisfacción mostrada públicamente por Hidalgo ante la gestión de Zapatero, con la frustración de Barceló ante la rotunda negativa del presidente a aplicar la rebaja del impuesto de sociedades a las grandes empresas familiares, cuyo lobby representa ahora el hotelero mallorquín.
Tres horas de reunión con el presidente Zapatero que, en términos generales, han sido muy bien acogida por el Sector, subrayando el eficaz quehacer de Joan Mesquida en Turismo.
Que le sea útil. Ese es nuestro mayor interés.










