El último informe de Jones Lang LaSalle Hotels & Hospitality Group sobre inversión hotelera en España puso en papel algo que ya va siendo de dominio público: las considerables diferencias existentes entre Madrid y Barcelona. Mientras que la primera afronta una demanda débil y caídas del RevPAR del 3,7%, Barcelona logra buenos resultados operativos para el conjunto de ese año y una mejora del RevPAR del 7,6% en comparación con 2011. Afortunadamente para la capital, ésta sigue siendo una prioridad para operadores internacionales en España, según asegura el informe. Existe interés por parte de las marcas internacionales por entrar en un mercado aún dominado por operadores nacionales, sobre todo ahora que es «un buen momento para entrar a precios atractivos».

