Díaz Ferrán, que reconoce que en sus 40 años como empresario nunca se había visto "en una situación tan complicada como ésta", asegura que están poniendo "toda la fuerza, imaginación y esfuerzo" para superarla. El copropietario del grupo ha insistido en que los problemas que arrastra Marsans se deben a la expropiación, que califica de "expolio", por parte del Gobierno argentino de Aerolíneas Argentinas, que influyó en el cierre de Air Comet y que "se han trasladado también" a Viajes Marsans.
Por otra parte, la Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de Comisiones Obreras (CC OO) ha solicitado al Gobierno que supervise el proceso de venta de Viajes Marsans a "un grupo de empresas solventes del Sector", ya que lo considera necesario para "garantizar el mantenimiento de los puestos de trabajo". Según el sindicato, esta iniciativa supone "un último intento" para evitar que continúe la "quiebra en cascada" del conglomerado de empresas del grupo.
La situación que atraviesa Marsans está provocando que diversos clientes corporativos del grupo estén cambiando de agencia de viajes, mudando sus contratos a otras firmas, como la multinacional especializada en viajes de negocios Carlson Wagonlit Travel (CWT), Viajes El Corte Inglés y American Express Barceló Viajes, entre otras. Tal y como confirma un portavoz de CWT, "hay clientes de Marsans con los que estamos contacto desde hace meses".











