Delta Air Lines ha realizado una reorientación estratégica de su flota para intentar reforzar su posición como aerolínea global líder en vuelos trasatlánticos sin adquirir ni un sólo avión nuevo. Así, ocho aviones Boeing 767-300ER y cinco Boeing 767-400 están pasando de rutas nacionales a internacionales para impulsar el crecimiento de la compañía en la zona trasátlántica el próximo verano.









