Para decidir si son necesarios estos cambios y presentar una propuesta de revisión de las líneas directrices sobre aviación de aquí a 2012, ha iniciado una consulta pública, que concluirá el 6 de junio. Bruselas señala que las subvenciones permitieron a las compañías aéreas tradicionales concluir sus procesos de reestructuración en un momento de liberalización del mercado, mientras que las low cost han podido desarrollar en los últimos años "nuevos modelos de empresa instalándose en los aeropuertos regionales y logrando importantes cuotas de mercado".
Sin embargo, ha recibido "un importante número de quejas" de parte de las aerolíneas convencionales por las ayudas a las de ‘bajo coste’ y viceversa. Además, existen distintos fallos del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) que indican que la construcción de infraestructuras aeroportuarias supone actividad económica de explotación de aeropuertos y que su financiación por los poderes públicos constituye una ayuda de Estado.











