La aerolínea atribuye este resultado negativo a la crisis económica, aunque destaca que ha logrado reducir costes por valor de 1.149 millones de euros, de los cuales 688 millones corresponden al combustible. La cifra de negocio anual alcanza los 9.186 millones de euros, lo que supone un recorte interanual del 11%. En cuanto al presente ejercicio fiscal, British Airways asegura que las previsiones son ligeramente más optimistas, aunque recuerda que el año se ha iniciado con grandes pérdidas por los efectos del cierres del espacio aéreo a consecuencia de la nube volcánica.
Sobre la fusión con Iberia, el consejero delegado de British, Willie Walsh, confirma que se completará a finales de este mismo año y que generará sinergias de 400 millones de euros a partir de su quinto año. Asimismo, se muestra expectante ante la posibilidad de que su alianza con la aerolínea española y American Airlines cuente con el visto bueno de las autoridades de la Unión Europea y Estados Unidos.










