El hotel es propiedad del Grupo Gaviota, estará gestionado por Barceló y nace con una "clara vocación" de dar alojamiento y servicios de "alta calidad" tanto a clientes de negocio como de ocio.
Además, el objetivo de la cadena es convertirlo en "uno de los mejores referentes gastronómicos de La Habana" con su restaurante Don Quijote especializado en cocina tradicional española y dirigido por el chef Santiago Alonso.
Barceló Hotels & Resorts tiene previsto seguir apostando por su expansión en Cuba y pretende ampliar su portafolio de cinco hoteles y 2.466 habitaciones con la incorporación de otros tres hoteles y 1.688 habitaciones adicionales.









