El viaje organizado protagoniza una suerte de esquizofrenia. Mientras el receptivo ve crecer la llegada de turistas extranjeros a España en "paquetes", el mercado doméstico sufre una continua sangría. La explicación está en las diferentes evoluciones del receptivo y el emisor. De hecho, una de las principales causas del incremento de llegadas se debe al efecto de la Primavera Árabe. Y buena parte de estos flujos están en manos de los grandes turoperadores (alemanes y británicos). Por el contrario, el mercado emisor español sufre una contracción, acorde con el desplome del consumo.


